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julio 5, 2023Argentina y las próximas elecciones, mucho para analizar
septiembre 22, 2023Analicemos las «PASO» en Argentina
Quiero compartir con ustedes algunas reflexiones, en caliente, sobre lo acontecido el domingo en las elecciones primarias, abiertas, simultaneas y obligatorias (las famosas “PASO”) celebradas en Argentina.
Si bien una lectura superficial de las mismas invita a celebrar, a menos a quienes abrazamos las ideas liberales, hay otras cuestiones que debemos analizar a la hora de sacar conclusiones.
Comencemos por lo positivo:
Más allá de los nombres propios, había para mí dos cuestiones absolutamente fundamentales en estas elecciones:
- que Unión por la Patria, es decir el kirchnerismo, no superara a nivel nacional el 32.43% de los votos que obtuvo en las PASO de 2021; y
- que la suma de los votos obtenidos por Massa, Grabois, Larreta, Moreno, Schiaretti y los candidatos de izquierda (es decir, de aquellos candidatos que, desde un partido u otro, abogan por un Estado absolutamente sobredimensionado y por una Economía dirigida) sea menor al 50%. O, dicho de otro modo, que Milei y Bullrich sumasen más del 50% de los votos.
Lo primero se dio y lo segundo, casi…
Si quieren terminar el día felices, no sigan leyendo. En caso de hacerlo, tengan en cuenta que, como diría mi amigo Carlos Maslatón, las advertencias han sido debidamente presentadas.
Sigamos entonces con este análisis:
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- Hoy, nos guste o no, la segunda vuelta más probable es entre Javier y Massa. Obviamente, falta mucho para octubre y, sobre todo en un país como Argentina, pueden pasar muchísimas cosas, pero la sensación es que le va a ser más fácil crecer a Sergio que a Patricia. Por otro lado, ¿para quién imaginan que va a jugar Larreta? ¿Para Bullrich? Recordemos que, cuando advirtió que perdía la interna, hizo de todo para evitarlo. Manipuló la forma de votar, apoyó bastante explícitamente a Lousteau por sobre Jorge Macri y forzó hasta límites insospechados el eventual ingreso de Schiaretti a la coalición. ¿En serio piensan que, sin nada para ganar, ahora va a apoyar a Patricia? Obvio que va a manifestar que sí, pero, desde mi punto de vista, serán solo palabras vacías. Por otro lado, Bullrich y Massa tienen más limitaciones a la hora de adaptar sus discursos de campaña. Si Massa decide moverse hacia el centro o hacia la derecha, perderá los votos de Grabois. Si Patricia se hace más extremista, quizás evita una fuga de votos hacia Milei, pero se le complica capturar el 100% de los votos de Larreta y no podrá convencer a los independientes ni mucho menos a los Peronistas desilusionados. Todo este análisis, obviamente, pierde sentido si Milei gana en primera vuelta, lo cual no sería para nada una locura, ya que lo haría alcanzando el 40% y ganándole por 10% al segundo. Y la historia muestra que a quien gana las primarias le resulta más sencillo sumar apoyos, equipo y recursos financieros.
- Otra cosa que es probable que suceda es que el Peronismo retenga PBA (de hecho, dejaron a Kicillof como candidato a gobernador en lugar de subirlo a Nación para atrincherarse allí), que Juntos haga lo propio con CABA y que un tercer partido, que sería tercera minoría por lejos en el Congreso de la Nación (LLA), se quede con el gobierno nacional. Esto es algo absolutamente inédito para el país y generará una inestabilidad política con la cual habrá que lidiar. En ese contexto, aprobar leyes que achiquen el Estado y/o que reduzcan el esfuerzo fiscal que hacen día a día los pagadores de impuestos argentinos no va a ser tan sencillo. Para ponerlo de manera gráfica, si se mantienen los resultados de las PASO en las elecciones generales, La Libertad Avanza contará con tan 8 senadores (sobre 72) y 40 diputados (sobre 357). Si bien con los diputados de Juntos por el Cambio, que sería la primera minoría y accedería a la presidencia de la Cámara, tendrían quórum propio, en el Senado estarían lejos de tenerlo.
- Más lo analizo y peor me parece la elección de Juntos por el Cambio. Tan pendientes estaban de ganarle al oficialismo, y tan convencidos estaban de que lo harían (recordemos que tuvieron la misma soberbia en las PASO de 2019) que no se dieron cuenta de que los demás candidatos también juegan y que las peleas internas les iban a pasar factura. La realidad es que, mientras el oficialismo perdió un par de puntos en comparación con las últimas PASO (las de 2021), lo cual es lógico después de la paupérrima gestión de Alberto-CFK-Massa, el hasta ayer principal partido de la oposición cayó del 41.53% al 28.30% y terminó solamente un punto y poco por encima del kirchnerismo.
Eso sí, aún cuando puedan venir tiempos mejores a partir de diciembre, tenemos por delante al menos seis meses de gran inestabilidad política y, como siempre explicamos, la inestabilidad política suele generar inseguridad jurídica y aumenta la necesidad de proteger lo que uno tiene.
El genial Tato Bores terminaba sus monólogos con su famoso latiguillo “Por eso, mis queridos orejones del tarro, a seguir laburando, la neurona atenta, vermouth con papas fritas y ¡Good Show!”. Salvando la distancia, yo también voy a recurrir a una de mis frases “clásicas” para ir cerrando estas reflexiones, esta vez ya en referencia a las elecciones generales y eventualmente al balotaje: “voten a quien quieran, pero protejan sus activos”.